¡Es sábado! La Virgen María nos espera con algún gesto de amor espacial. Ella, la Madre del Señor, es honrada en la Iglesia de una manera muy especial cada sábado, porque si el viernes es dedicado a recordar el martirio del Hijo, el sábado siguiente se dedica al martirio de la Madre.
Desde tiempos inmemorables, en la mañana del sábado, en diversas partes del mundo se reza o se canta la Salve, la Sabatina, o se realizan otras oraciones y preces marianas y muchos cristianos procuran esmerarse este día en honrar a la Reina del Cielo: escogen una jaculatoria para repetírsela muchas veces en el día, hacen una visita a alguna persona enferma o sola o necesitada, o, como la beata María Inés Teresa —que ofrecía no comer frutas el sábado para darlas espiritualmente a la Virgen— ofrecen una mortificación o un pequeño sacrificio que marca este día mariano.
Es sábado... ¿Qué vamos a hacer para honrar a María? Tal vez rezar más pausadamente el Santo Rosario, buscar en Spotify o en youtube algunos cantos marianos y escucharlos, ver algún video sobre la Virgen, elevar alguna pequeña oración, escribirle algo... ¡Qué se yo!
¡Feliz y bendecido sábado, bajo la mirada dulce de María!
Padre Alfredo.
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