martes, 13 de septiembre de 2022

10 cosas que los católicos estamos cansados de escuchar y son falsas...


Hay personas que, sin conocer bien la religión católica, nos acusan de idólatras y de que la Iglesia Católica ha inventando innumerables reglas para mantener a los fieles mansos. Algunos dicen que no somos cristianos, que adoramos a la Virgen y a los santos y no sé que otras cosas más.  

Aquí están las principales cosas que «nos achacan» como católicos y que son falsas:


1. Los católicos adoran imágenes.

No solo es completamente falso, sino que es absurdo. Siendo realistas, la mayoría de esas personas tiene fotos en sus casas, lo cual es completamente normal. Muchos tienen fotos de sus seres queridos, tanto de los vivos como de los que han fallecido. ¿No es entonces algo hipócrita decir que los católicos son idolatras cuando estas familias que no comprenden la presencia de imágenes en nuestra vida, tienen retratos de sus seres queridos en las paredes? Si ellos pueden tener fotos de sus familiares difuntos colgadas en la pared, entonces la Iglesia católica puede tener fotos de nuestro amado Jesús, sus discípulos y los santos.


2. Los católicos le rezan a María en lugar de a Dios.

Este es un error muy común en toda la comunidad protestante, y aunque se puede entender su motivo,  desanima el hecho de que muchos de ellos saltan de inmediato con una dura conclusión sobre la fe católica. Los Católicos le oramos a María con cariño y gratitud, sobre todo con el rezo del Santo Rosario que nos trae a la mente y al corazón distintos misterios de la vida de Cristo, pero pidiendo su poderosa intercesión, que ore por nosotros ante Dios, al igual como un protestante le pide a su abuelo fallecido que vele por ellos.


3. Los santos no pueden oír sus oraciones porque están muertos.

Empecemos este apartado con una pregunta: ¿Desde cuándo una persona que está en el Cielo se considera un muerto? Lo llamamos el más allá por una razón. De hecho hay una prueba bíblica de que los santos pueden escuchar nuestras plegarias:

«Cuando lo tomó, los cuatro Seres Vivientes se postraron ante el Cordero. Los mismo hicieron los veinticuatro acianos que tenían en sus manos arpas y copas de oro llenas de perfumes, que son las oraciones de los santos.» (Ap 5,8).

«Otro ángel vino y se paró delante del altar de los perfumes con un incensario de oro. Se le dieron muchos perfumes: las oraciones de todos los santos que iban a ofrecer en el altar de oro colocado delante del trono; y la nube de perfumes, con las oraciones de los santos, se elevó de las manos del ángel hasta la presencia de Dios.» (Ap 8,3-4).


4. La Virgen María no es importante; ella es como cualquier otra persona.

Si la Santísima Madre no es importante, entonces cada mujer hubiese tenido una Concepción Inmaculada. Es por esa razón que la anterior declaración no tiene sentido, por supuesto que la Virgen María es importante, ella dio a luz a nuestro Señor y Salvador, Jesucristo.

Una de las cosas que hace tan asombrosa a la fe católica que profesamos, es que reconocemos la importancia de María y la veneramos. Ella es un modelo a seguir y una santa para todos los cristianos, alguien a quien admirar porque ella se rindió ante Dios por completo.

Hasta el día en que otra mujer dé a luz a Jesús, nadie será como María, una mujer muy especial, una mujer sagrada.


5. Los católicos han inventado todas sus reglas.

Cada una de las tradiciones que tenemos en la Iglesia Católica tiene raíces bíblicas. Por no mencionar el hecho de que Jesús es el fundador de la Iglesia. Toda enseñanza de la Iglesia está basada en la Sagrada Escritura, en la Tradición y en el magisterio de la Iglesia. Contando desde esta día, hacia atrás, nos damos cuenta de que la única Iglesia que llega hasta los tiempos de Cristo en una forma directa, es la Iglesia Católica, las demás han ido surgiendo en los siglos subsiguientes.


6. Dios dijo que le confesáramos los pecados a Él, no a un sacerdote.

Ante esto podemos ver lo que la Biblia dice al respecto:

«Reconozcan sus pecados unos ante otros y recen unos por otros para que sean sanados. La súplica del justo tiene mucho poder con tal de que sea perseverante». (Santiago 5,16).

Es cierto que debemos orar directamente a Dios y pedirle perdón, sin embargo por los pecados —mortales— que cometemos, debemos confesarnos unos a otros —con nuestros sacerdotes— como indicó Jesús.

Él les dio esta instrucción directamente a sus discípulos, para que por medio de Él, ellos fuesen capaces de perdonar los pecados (Jn 20,21-23). Este poder fue transmitido a cada sacerdote, sucesivamente hasta nuestros días.


7. El catolicismo es un culto más.

Jesucristo fundó la Iglesia Católica hace más de 2000 años. Difícilmente lo pudiéramos llamar un culto. La Iglesia tiene una tradición para celebrar la Eucaristía que viene desde los primeros cristianos. Rendimos culto a Dios no como un culto más, sino con celebraciones litúrgicas que están bien fundamentadas.


8. Los católicos no son cristianos

La palabra cristiano se relaciona con cualquier persona que siga las enseñanzas de Cristo, y ya que la Iglesia Católica hace justamente eso, entonces somos los primeros cristianos. Todas las demás denominaciones cristianas, incluidos los cultos que nacen por aquí y por allá hasta en cocheras de casas, han surgido tiempo después del catolicismo. 

Nosotros somos cristianos católicos y «católico» significa «universal», porque nuestra Iglesia está presente en el mundo entero.


9. Los católicos agregaron libros a la Biblia.

Durante 300 años no hubo Biblia, solo escritos al azar de los profetas como y cartas de san Pedro, san Pablo y otros etc. hasta que los monjes católicos compilaron y establecieron un canon con lo que hoy se conoce como Santa Biblia. Esto fue así hasta que ocurrió la reforma protestante y un hombre llamado Martin Lutero eliminó siete libros sólo porque no quiso reconocerlos como inspirados por Dios. 

Los libros que los protestantes eliminaron de la Biblia y que consideran apócrifos son: Tobías, Judit, Ester (protocanónico con partes deuterocanónicas), Daniel (protocanónico con partes deuterocanónicas), I Macabeos, II Macabeos, Sabiduría, Eclesiástico (también llamado "Sirac") y Baruc. 


10. Los católicos creen que pueden pagar el camino hacia el Cielo.

Por supuesto que los católicos no creemos eso. Se trata de un malentendido enorme que se produjo durante la Reforma Protestante. A pesar de los muchos estereotipos que se ciernen sobre nuestra fe, lo importante es recordar que nuestra Iglesia ha resistido la prueba del tiempo y que se ha mantenido durante más de 2000 años. Este reclamo de ellos es por las indulgencias que se pueden ganar por diversas prácticas para eliminar la pena que hay que pagar por los pecados cometidos.


Espero que estas 10 cosas bien clarificadas, nos ayuden a vivir con más profundidad nuestra fe como católicos.

Padre Alfredo.

1 comentario:

  1. Gracias por iluminar más mi camino hacia Jesús,la Virgen María y a todos los Santos 🙏❤️🌹

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